La fontanería y la gestión del agua

12 Abr La fontanería y la gestión del agua

La fontanería es aquella actividad profesional relacionada con la instalación y mantenimiento de redes de tuberías para dar un correcto servicio de agua potable y evaluar las aguas residuales, además de las instalaciones de calefacción en edificios y construcciones. Por tanto hablamos de una gestión del agua que cada vez requiere una mayor importancia, pues es un bien todavía abundante en el planeta, pero del que no se debe abusar.

La fontanería y la gestión agua

De hecho, muchas organizaciones apuestan por un consumo sostenible con el objetivo de conservar este bien durante el mayor tiempo posible. No obstante, los humanos parecemos empeñados en agotarlo cuanto antes, sin saber que se puede morir antes por falta de agua que por falta de comida.

De esta forma, las campañas para controlar el agua son cada vez mayores, buscando la concienciación de las personas para llevar a cabo una correcta gestión. Y para ello, son ya muchos los sistemas que cuentan con un procesador automático para la monitorización de la gestión del agua, buscando tener el control en todo momento.

Por ello, en este post explicaremos las ventajas de este sistema automático y qué beneficios tiene para nosotros, los seres humanos. Comenzamos.

Monitorizando la gestión del agua

La monitorización de las infraestructuras que permiten la visualización en tiempo real con parámetros de funcionamiento del ciclo integral del agua permite una gestión más eficiente de los recursos, destacando las siguientes acciones:

– Establecimiento de abastecimiento, saneamiento y depuración. Con esta acción logramos que se inicie el ciclo de agua, haciendo los ajustes necesarios para que llegue al máximo número posible de personas. Igualmente, el saneamiento incluye el mantenimiento y la conservación de estas aguas, una tarea a la que se suma la depuración para que podamos disfrutar de un agua pura y limpia.

– Redes de abastecimiento y sectorizaciones.  La monitorización permite controlar en tiempo real todos estos parámetros, sabiendo qué cantidad de agua es destinada a qué lugar y en qué momento, así como las sectorizaciones permiten distinguir la correcta división de las aguas y hacia dónde van distribuidas.

– Canales de transporte de agua y balsas. Como en el punto anterior, la monitorización de la gestión del agua hace que podamos controlar cómo se transporta el agua, haciendo un seguimiento de los canales para medir su fuerza y presión, así como las balsas ayudan a que este componente líquido llegue al consumidor final en buen estado y pueda hacer un uso normal de sus funciones, ya sea para el cuarto de baño o la cocina.

– Sistemas de regadío y minerías. Por otro lado, la monitorización hace que podamos llevar el agua a los cultivos y minas mediante las redes antes mencionadas, donde controlaremos la cantidad de agua que es destinada a estos sectores, buscando que ayude a la generación de buenos y saludables alimentos y a la extracción de materiales minerales para que posteriormente sean tratados por el mismo ser humano.

– Procesos industriales relacionados con la gestión del agua. Aquí controlamos, como en los anteriores puntos, el agua que se distribuye a las industrias, pudiendo mandar más o menos agua según las necesidades de cada sector.

– El agua en la industria alimentaria y de bebidas. Finalmente, la alimentación es un sector clave, ya que el agua también debe llegar en perfecto estado a los establecimientos comerciales para que estos puedan comercializar sus productos, tanto de comida como de bebida.

Un adecuado aprovechamiento

En conclusión, el tratamiento del agua mediante la fontanería y la gestión agua son claves a la hora de desarrollar las actividades normales de las personas, siendo un elemento fundamental para los distintos sectores de la economía nacional e internacional. En este sentido destaca Uponor. No dejes de leer también este otro artículo.